JULIÀ

En campo de plata, cuatro palos de azur.

Apellido muy antiguo en Valencia y Mallorca, pues ya existía en el siglo XIII.

Maymón Juliá en 1285, como representante de la villa de Lluchmajor, juró obediencia y fidelidad al rey don Alfonso III de Aragón.

Jaime Juliá de Sineu en 1523 fue miembro del grande y general consejo de este reino, y Gabriel Juliá de dicha villa lo fue en 1563.

Antonio Juliá en 1670 obtuvo privilegio de ciudadano militar por los servicios que prestó al rey don Felipe II.

Pedro Juliá fue sargento mayor del ejército en las guerras de Milán y Sicilia en el año 1637.

Don Francisco Juliá, caballero del hábito de Calatrava sirvió en una compañía suya en las guerras de Nápoles y ganó la villa y castillo de Anunciata. Continuó sus servicios en Cataluña y mereció por ellos privilegio de ciudadano que le concedió el rey Felipe IV en 17 de mayo de 1645.

Don Jaime Juan Juliá y Garriga, caballero de la orden militar de Calatrava, fue baile general de Mallorca en el año 1639, clavario en 1646, y jurado en 1647 por la clase de ciudadanos. Obtuvo de S. M. el privilegio de nobleza en 3 de octubre de 1649.

Don Nicolás Juliá fue jurado de esta ciudad y reino por la clase de ciudadanos.

Hay ramas de esta familia en Sineu, Binisalem y otros pueblos, y en dos casas de ella sucedieron las de Brondo y de Togores, la primera por doña Ana Juliá y Garriga que casó con don Ramón Brondo, y la de Togores por doña Juana Zanglada y Rossiñol, hija y heredera de don Mateo Zanglada y Juliá, que casó, con don Atonio Togores y Net.